Categoría: Postres
Dificultad: Fácil
175 gramos de nata bien fría.
50 gramos de azúcar glass tamizado.
2 plátanos, el zumo de 2 limones.
375 gramos de piña triturada.
175 gramos de guindas de marrasquino.
Vertemos la nata en un bol grande y batimos hasta que quede con textura de espuma. Añadimos el azúcar glass y batimos unos minutos más.
A continuación pelamos y trituramos los plátanos. Le echamos el zumo de limón y la piña triturada a la nata, y removemos bien toda la mezcla.
Echamos las guinda en la mezcla, reservando alguna para adornar, y también un delilitro de su propio jugo, y removemos todo con suavidad.
Vertemos la mezcla del helado en un recipiente hondo y lo introducimos en el congelador un par de horas, sin taparlo.
Retiramos el helado y tras removerlo, volvemos a meterlo en el congelador ocho horas más.
Se recomienda cambiar el helado a la nevera media hora antes de ser servido para que ablande un poco. Lo decoramos con las guindas que habiamos reservado, y listo para disfrutar.
