Porciones / número de personas: 10
Categoría: Huevos y Lácteos
Dificultad: Fácil
75 ccs de aceite de maíz.
0,5 cebolla grande.
3 chiles poblanos.
1 kilo de harina maíz.
20 hojas de maíz o platano remojadas.
1 pizca de pimienta.
500 gramos de queso ahumado.
25 gramos de sal.
1 pizca de sal.
750 ccs de agua.
Los chiles se asan, se pelan y se desvenan, después se cortan en rodajas. La cebolla se corta en media luna y se pone a freír con aceite hasta que estén transparentes, enseguida se ponen las rodajas y se dejan con sal y pimienta a fuego lento durante 10 minutos.
Se sacan del fuego y se dejan aparte. El queso se corta en cuadritos de 2 centímetros. Para realizar la masa, se pone a hervir el agua con el aceite y la sal, cuando este hirviendo fuerte se le pone la harina de golpe y se mueve enérgicamente con una pala de madera hasta que se despegue de la cazuela.
Una vez que esto suceda se pasa la masa a otra cazuela y se procede a hacer los tamales. En una hoja de maíz ya remojada se pone aproximadamente 2 cucharadas de masa y se extiende un poco, en la parte de en medio se le pone una cucharada de rajas y unos cuadritos de queso.
Se envuelve y se dobla para evitar que se salga la masa a la hora de cocer. Se van colocando en una cacerola de vapor cuidando que queden bien juntos unos con otros y tapando el espacio. Se tapan con un trapo y después con la tapadera de la cacerola y se ponen al fuego alto por espacio de 1 hora.
Se sirven calientes o fríos con chocolate.
