Porciones / número de personas: 4 personas
Categoría: Postres
Dificultad: Fácil
1 huevo
250 gr. Harina
Azúcar
1 cascarón (de huevo) de aguardiente o anís
2 cascarones (de huevo) de aceite de girasol
Una pizca de sal
Unas gotas de vinagre.
Son típicas en muchas sitios en Carnavales o en días de fiesta. En Galicia se llaman orellas (la receta es muy parecida aunque no igual) y son una masa frita crujiente y dulce hecha con ingredientes muy sencillos.
Lo primero que se hace para hacer hojuelas es romper el huevo por la punta, sin romperlo mucho porque lo vamos a utilizar como medida para el resto de ingredientes.
Echamos el huevo en un bol junto a una medida de huevo de aguardiente o anís, una medida de aceite y batimos bien. A continuación agregamos una pizca de sal y de vinagre. Volvemos a batir.
Incorporamos la harina al bol y vamos amasando con las manos. Echaremos la harina necesario hasta que la masa no quede pegajosa y no se pegue a las manos.
Amasamos hasta que la masa sea flexible y brillante, echando un poco de harina en las manos y en una superficie lisa, para que no se pegue.
Extendemos la masa con un rodillo hasta que quede lo más fina posible (las hojuelas son muy finas).
Recortamos trozos rectangulares con un cuchillo y los echamos en una sartén con aceite bien caliente, con la ayuda de una espátula para que no se rompan, ya que la masa es muy fina.
Sacamos las hojuelas de la sartén cuando estén doraditas y las ponemos en una fuente con papel absorvente por debajo, para que absorva el exceso de aceite.
Todavía caliente le espolvoreamos azúcar por encima y las dejamos enfriar. Las hojuelas aguantan varios días perfectas.
Nota: Lo mejor es hacerlas entre dos personas, una que estire y corte la masa y la otra que las fría, porque son muy finas y se queman muy rápido.