Porciones / número de personas: 2 personas
Tiempo de Preparación: 35 minutos
Tiempo de cocción: 10 minutos
Categoría: Marisco
Dificultad: Fácil
1 langosta
Un limón
2 cucharadas de mantequilla
Pimienta
Sal gorda
Aceite de Oliva
Perejil
La langosta a la plancha está absolutamente deliciosa. El hecho de poder comerla caliente le otorga un gusto especial al marisco y nos permite consumirla sin perder sus jugos. Un capricho que siempre merece la pena y que puede acompañarse de una ensalada como complemento perfecto.
Lo primero que debemos hacer para preparar una riquísima langosta a la plancha es limpiarla. Para ello la partimos por la mitad con un cuchillo afilado, haciendo un corte desde la cabeza hasta la cola.
Después, le quitamos el estómago y el intestino, y la dejamos lista para ser cocinada. Sobre cada una de las mitades echamos un poco de pimienta y el zumo de un cuarto de limón. Dejamos que repose durante 20 minutos.
A continuación, calentamos la plancha y, cuando esté caliente, echamos un poco de sal gorda sobre ella. Sobre la sal ponemos el marisco, primeramente con la parte de la carne hacia la plancha. Dejamos que se haga durante unos minutos y le damos la vuelta.
Sobre la parte ya hecha echamos un poco de perejil, bien picado, y una pizca de mantequilla. Dejamos que la langosta se haga cinco minutos más, mientras la mantequilla se va fundiendo.
Después, sacamos de la plancha y emplatamos. Para terminar de completar el salón añadimos un chorrito de aceite de oliva virgen extra y servimos inmediatamente, antes de que se enfríe. ¡Buen provecho!