Categoría: Aperitivos y Tapas
Dificultad: Fácil
1 pulpo de unos 2 kilos.
½ kilo de patatas.
2 decilitros de aceite de oliva virgen extra.
2 cucharaditas de pimentón dulce.
2 cucharaditas de pimentón picante.
Sal gruesa.
Es mejor que el pulpo sea congelado, o se congele unos días antes de cocinarlo para que salga más blando.
Descongelamos el pulpo y lo limpiamos bien, quitándole el culo y los ojos. Ponemos agua a hervir en una olla, y echamos el pulpo entero cuando rompa a hervir, eso sí, a través de la técnica llamada "asustar el pulpo" (consiste en agarrar el pulpo por la cabeza, y meterlo en el agua y sacarlo tres veces seguidas, sin soltarlo).
Cocemos el pulpo durante 45 minutos (ni uno más) y lo dejamos reposar sin tapadera, con el fuego apagado, 15 minutos.
Pelamos y cortamos las patatas en rodajas y las cocemos en la misma agua del pulpo hasta que estén tiernas (lo sabremos pinchándolas).
Cortamos el pulpo en trozos con la ayuda de una tijera y una tenedor.
Lo colocamos en un plato de madera y alrededor las patatas. Lo aliñamos con un chorro de aceite de oliva, pimentón dulce, pimentón picante (muy poco, sino picará demasiado)y sal gruesa.
Foto: http://www.flickr.com/photos/jlastras/
Introducción de la receta