Tiempo de Preparación: 2 horas.
Tiempo de cocción: 20 minutos
Categoría: Navidad
400 g de harina.
100 g de mantequilla.
100 g de azúcar.
1 cucharada de levadura.
1/4 litro de leche.
1 cucharada de agua de azahar.
La corteza de limón rallada.
Fruta confitada (calabaza, naranja, guindas).
sal.
1 haba.
Muñequitos de sorpresa.
Desde muy niño el roscón de reyes es sinónimo de fiesta en mi casa, como colofón a unas navidades llenas de grandes manjares, nos comíamos el roscón mientras abríamos los regalos de reyes.
Primero haremos la mezcla de levadura, para ello disolvemos el sobre de levadura en 4 cucharadas de leche templada. Añadimos 100 g de harina y lo mezclamos bien, hasta conseguir una masa blanda. La tapamos con un trapo de cocina y dejamos que repose hata que crezca, y doble su volumen.
Para hacer la masa del bizcocho utilizaremos otro bol, en el que ponemos el resto de la harina (300g). Hacemos un hueco en el centro y echamos en él 3 huevos, el azúcar, el resto de la leche, el agua de azahar y el limón rallado. Amasamos todo hasta que tengamos una masa fina. Le incorporamos la mantequilla y seguimos amasando. Unimos esta masa con la de la levadura y amasamos hasta que esté todo muy bien mezclado. Le espolvoreamos arina por encima y dejamos que repose, en un trapo de cocina, durante un mínimo de dos horas.
Tras estas dos horas, volvemos a amasar y la ponemos en la bandeja del horno, sobre papel de cocina. Le damos forma de rosca. Introducimos el haba envuelto y las las sorpresas, envuelto todo en papel albal.
Adornamos la rosca con tiras de las frutas confitadas, la pintamos con huevo batido y espolvoreamos azucar sobre ella. Precalentamos el horno a 160º y la hacemos de 15 a 20 minutos.