Porciones / número de personas: 4 personas
Tiempo de Preparación: 80 minutos
Tiempo de cocción: 30 minutos
Categoría: Postres
150 gr. de coco rallado
250 gr. de harina
400 gr. de leche condensada
1 cucharada de levadura en polvo
4 huevos
250 ml. de leche
La tarta de coco está deliciosa. Este pastel es muy fácil de hacer, aunque no tengas experiencia en la cocina. Una de sus ventajas es que siempre sale bien, por lo que se convertirá en tu favorito en cuanto la pruebes. Su exquisito sabor es el secreto de su éxito.
Para disfrutar de una deliciosa tarta de coco lo primero que debemos hacer es tamizar la harina con la ayuda de un colador. En el mismo recipiente añadimos el polvo de hornear. Aparte, separamos las yemas de las claras y guardamos éstas últimas en el frigorífico.
En otro bol mezclamos la mantequilla y las yemas de huevo. Batimos con unas varillas hasta obtener una crema homogénea. Añadimos entonces la leche entera, y el coco rallado y la leche condensada, reservando seis cucharadas de leche condensada y 100 gramos de coco rallado para adornar la tarta.
Removemos bien y cuando todos los ingredientes se han mezclado tapamos el bol con un film y lo metemos en el frigorífico durante media hora para que repose la masa.
Cuando hayan pasado 20 minutos desde que introducimos el bol en el frigorífico ponemos a precalentar el horno a 180º C., con calor por arriba y por abajo. A continuación batimos las claras que tenemos en el frigorífico a punto de nieve y se las añadimos poco a poco a la masa que tenemos en reposo. Removemos con movimientos envolventes.
Forramos un molde con papel de hornear y vertemos la masa en el molde. Después, horneamos durante una media hora y una vez transcurrido este tiempo dejamos reposar cinco minutos. Pinchamos la tarta con un palillo. Si sale limpio la tarta está hecha, pero si no horneamos diez minutos más, a 160º C.
Ya solo queda decorar la tarta. Una vez se ha enfriado el bizcocho lo partimos por la mitad dando un corte horizontal y untamos un poco de leche condensada y añadimos un poco de coco. Después, colocamos el otro trozo del bizcocho encima y volvemos a repetir la operación, extendiendo un poco de leche condensada y poniendo encima coco rallado. ¡Deliciosa!