Porciones / número de personas: 1 persona
Tiempo de Preparación: 15 minutos
Tiempo de cocción: 10 minutos
Categoría: Guarniciones
Patatas
Mantequilla
Sal
Leche
Clara de huevo, opcionalmente
Pimienta, opcionalmente
Nuez moscada, opcionalmente
Los trucos para un puré de patatas perfecto son muy sencillos. En primer lugar debemos elegir unas patatas de variedad harinosa, que no sea nueva ni tampoco esté excesivamente envejecida.
Lo mejor para hacer el puré es cocer las patatas enteras y sin haberlas pelado, en abundante agua fría con sal. Si no queremos cocerlas con piel las pelaremos y después las dividiremos en cuatro trozos con un corte de cuchillo. El agua debe cubrir las patatas hasta unos tres centímetros por encima de ellas.
Es importante que la patata esté bien cocida. Para ello la pincharemos con un cuchillo y comprobaremos que se introduce perfectamente en la patata. Una vez cocidas se pasan a colador, donde escurrimos el agua sobrante.
Para hacer un puré de patatas perfecto lo mejor es utilizar un machacador de patatas, un pasapuré clásico o bien machacarlas con un tenedor cuando la patata está todavía caliente. Después le añadiremos mantequilla fría y cortada en trocitos, o bien aceite de oliva, y la sal que estimemos, removiendo todo bien.
Después le añadiremos la leche, que debe estar caliente, y que debe ser introducida siempre detrás de la mantequilla. Removemos bien y si queremos un puré esponjoso podemos añadir una clara de huevo batida a punto de nieve. Por último, incorporaremos pimienta o nuez moscada, opcionalmente. Removemos todo con cuidado y servimos inmediatamente.
Para recalentarlo lo mejor es hacerlo al baño maría, a fuego suave, removiéndolo cada quince minutos. En cualquier caso, se puede conservar hasta 48 horas en el frigorífico, siempre que esté tapado. Para facilitar el proceso de recalentado se puede añadir un poquito de leche muy caliente y removerlo todo bien. ¡Delicioso!
Introducción de la receta
Los trucos para hacer un puré de patatas perfecto son muy sencillos. Para lograr que te quede en su punto, cremoso y sabroso, tendremos que tener en cuenta aspectos como la elección de la patata, la forma de cocerla y la preparación del puré en sí, y posteriormente la conservación.
