Porciones / número de personas: 6 personas
Tiempo de Preparación: 360 minutos
Tiempo de cocción: 20 minutos
Categoría: Postres
Dificultad: Fácil
200 gr. de galletas
3 cucharadas de leche
1 cucharada de mantequilla fundida
500 gr. de queso crema
350 gr. de azúcar
500 gr. de nata para montar
100 gr. de nueces picadas, opcional
3 huevos
8 hojas de gelatina neutra
2 naranjas
100 ml. de agua
Para hacer una riquísima tarta de queso y naranja comenzamos haciendo la base. Para ello trituramos las galletas y las juntamos con la mantequilla fundida y la leche. Mezclamos todo hasta obtener una pasta. Con ella forraremos el fondo de un molde para tartas desmontable, aplastando la pasta con los dedos, para que quede más compacta. Reservamos en el frigorífico.
A continuación seguimos preparando la cobertura. Para ello, el primer paso es poner a hidratar la mitad de la gelatina que tenemos.
Aparte, cortamos las naranjas en rodajas y las ponemos en una cacerola junto con 200 gr. de azúcar y el agua. Dejamos que se vayan haciendo a temperatura media. Cuando veamos que se ha formado un caramelo de color anaranjado añadimos la gelatina y removemos con cuidado.
Sacamos cuidadosamente las naranjas y las ponemos en un plato. Echamos por encima el caramelo que hemos formado. Si vemos que algunas naranjas están más feas las apartamos y las picamos bien para añadirlas al cuerpo de la tarta. Reservamos.
Finalmente preparamos el relleno de la tarta. Para ello, lo primero que debemos hacer es poner el resto de la gelatina a hidratar.
A continuación apartamos 100 ml. de nata y la ponemos en una cacerola a fuego medio. Cuando esté caliente echamos la gelatina, removemos bien y reservamos en caliente.
Montamos la nata, que tiene que estar bien fría, y añadimos el queso crema. Mezclamos bien los ingredientes con unas varillas, muy despacio y con movimientos envolventes. Después, añadimos la gelatina que hemos disuelto en la nata y, si nos apetece, unas pocas nueces picadas y los trozos de naranja que hemos dejado bien picados. Reservamos.
Montamos 3 claras y vamos añadiendo el resto de azúcar que tenemos poco a poco. Después, añadimos esta mezcla a la anterior, pero muy poco a poco, removiendo con la ayuda de unas varillas con movimientos lentos y envolventes.
Ya sólo nos queda verter la mezcla que hemos conseguido en el molde, encima de la base de galletas, y conservar unas horas en el frigorífico. Después, antes de servir ponemos las naranjas confitadas encima de la superficie de la tarta, a modo de decoración, y volvemos a dejar en el frigorífico para que termine de coger cuerpo. ¡Deliciosa!
Introducción de la receta
