Porciones / número de personas: 3 personas
Tiempo de Preparación: 240 minutos
Tiempo de cocción: 25 minutos
Categoría: Postres
Dificultad: Fácil
350 gr. de queso de untar.
Un poco de mantequilla.
Un litro de nata líquida.
1 paquete de galletas tipo María.
250 gr. de leche.
2 sobres de cuajada.
250 gr. de azúcar.
125 gr. de grosellas.
Chocolate para fundir.
Una pizca de aceite.
Para hacer una riquísima tarta individual de queso, grosellas y chocolate, lo primero que debemos hacer es machacar las galletas hasta convertirlas en polvo. Después, las mezclamos con la mantequilla y hacemos una pasta, que pondremos en el fondo de tres moldes individuales de tartas que se puedan desmoldar. Apretamos un poco con los dedos para dar mayor consistencia y reservamos en el frigorífico.
Aparte, ponemos a hervir la leche con la nata líquida, a fuego medio. Cuando lo haga retiramos del fuego y le añadimos el queso, la cuajada y 150 gramos de azúcar. Removemos hasta que no queden grumos y volvemos a llevar al fuego. Cuando rompa a hervir de nuevo apartamos y volcamos sobre la base de galletas, y reservamos en el frigorífico unas cuantas horas, para que tome cuerpo.
Para la decoración, untamos con una pizca de aceite un poco de papel de aluminio y fundimos el chocolate. Después, lo metemos en una manga pastelera y hacemos dibujos en forma de enrejado sobre éste. Dejamos enfriar para que se solidifique y despegamos.
Aparte, ponemos a fuego lento las grosellas junto con el azúcar. Cuando tengan el punto que nos parezca adecuado, sin que las grosellas se hayan deshecho por completo pero hayan formado una especie de sirope, retiramos del fuego.
Desmoldamos las tartas y colocamos por encima las grosellas con el sirope que han formado, y el enrejado de chocolate que hemos hecho, bien entero o partiéndolo a nuestro gusto. ¡Deliciosas!
Introducción de la receta
