Porciones / número de personas: 4 personas
Tiempo de Preparación: 65 minutos
Tiempo de cocción: 50 minutos
Categoría: Verduras y legumbres
8 acelgas
Un tomate
Un puerro
3 huevos
80 gr. de bacon
Pimienta
Sal
Un paquete de pasta brisa
Un tercio de taza de nata
Una pizca de orégano, opcionalmente
Una cucharada de queso rallado
3 cucharadas de aceite de oliva
3 cucharadas de caldo de verduras
El quiché de acelga, puerro y tomate está delicioso. El secreto de su éxito se esconde en su delicioso sabor, fruto de una exquisita combinación de ingredientes, que le aportan un sabor único, de los que no se olvidan fácilmente. ¿Te apuntas a una receta sencilla, fácil y riquísima?
Para disfrutar de un riquísimo quiché de acelga, puerro y tomate lo primero que debemos hacer es precalentar el horno a 180º C. Desenrollamos la pasta brisa y forramos con ella un molde redondo, ajustando con las manos a los bordes.
A continuación recortamos el sobrante de los lados, pinchamos el fondo con un tenedor varias veces y colocamos unos garbanzos a modo de peso. Horneamos durante un cuarto de hora y después sacamos del horno y dejamos enfriar.
Mientras, en una sartén doramos el bacon, cortado en trozos pequeños. Cuando esté hecho reservamos.
Echamos en una sartén un poco de aceite de oliva y la ponemos a fuego medio. Cuando esté caliente echamos el puerro, picado muy fino. Un minuto más tarde añadimos las acelgas y posteriormente el tomate, también picado y sin piel.
Cocinamos un par de minutos, removiendo sin parar y después añadimos el caldo de verduras. Tapamos y dejamos que se vaya haciendo hasta que las acelgas estén blandas y el líquido se haya evaporado. Si queda algo de líquido, escurrimos.
Batimos los huevos con la nata, salpimentamos, añadimos un poco de orégano, opcionalmente, y echamos esta mezcla a las acelgas, el puerro, el tomate y el bacon.
A continuación vertemos la mezcla en el molde, ya sin los garbanzos, y espolvoreamos sobre la superficie el queso rallado. Después, metemos el molde en el horno y horneamos durante unos 45 minutos o hasta que veamos que el quiché está hecho. Ya solo queda sacar del horno, dejar enfriar ligeramente y desmoldar. ¡Delicioso!
